Fuente: La Capital ~ El municipio trabajará esta semana codo a codo junto al sector gastronómico para pensar una posible reapertura parcial de bares y restaurantes a partir del próximo fin de semana, cuando venza el decreto provincial que impuso restricciones a la actividad comercial para frenar el crecimiento de contagios en Rosario.
La idea del Ejecutivo local es empezar a delinear el regreso progresivo de la actividad luego del viernes a la noche, momento en el que perderá vigencia la medida, con la intención de cumplir con lo prometido en las últimas charlas a representantes de distintos rubros respecto de no estirar las limitaciones impuestas.
Por ello, se espera que en los próximos días haya anuncios sobre fechas y modalidades, aunque antes se pondrán en revisión algunos protocolos y se esperará el veredicto de las autoridades sanitarias. Por ejemplo, en principio bares y restaurantes no podrán sentar clientes dentro de los locales.
“La alternativa más firme que estamos evaluando es con mesas al aire libre”, dijo a este diario el secretario de Desarrollo Económico de la Municipalidad, Sebastián Chale. El objetivo es, teniendo en cuenta que se acerca la primavera y las temperaturas son más agradables, poder explotar este formato lo máximo posible para retomar la actividad bajando el riesgo.
Los gastronómicos recibieron con buen ánimo la posibilidad, que ya vienen dialogando desde la semana pasada con el intendente Pablo Javkin y su equipo. “Está muy bien para arrancar, pero también es esencial considerar la situación de los que no tienen la posibilidad de poner mesas en la calle. Hay muchos locales en el centro que no tienen vereda y deberían tener una oportunidad”, expresó Reinaldo Bacigalupo, referente de Mercado Pichincha.
Para el empresario, “es clave comenzar con esta apertura paulatina apoyada en una campaña de mucha conciencia y responsabilidad por parte de quien sale a pasar un buen rato”, ya que el delivery y take away anda muy flojo. Es que los bolsillos están muy golpeados y esto ya se siente en el cambio de los hábitos de consumo. “La gente pide mucho menos que el abril, cuando comenzó la pandemia”, ilustró.
Buscar alternativas
Carlos Mellano, de la Asociación Hotelero Gastronómica de Rosario, también ve con buenos ojos la propuesta, y dijo que “hay que buscar alternativas” en los lugares públicos: que los bares que están cerca de parques o plazas pongan mesas allí, se ocupen los espacios para estacionamiento o se corten calles los fines semana.
Todas estas alternativas habían sido incluidas en un proyecto que presentó hace uno meses el concejal rosarino Lisandro Zeno, y ya fueron implementadas hace días por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
“El distanciamiento es una de las cosas que van a quedar y debemos ser creativos, porque hasta que no tengamos la vacuna hay que trabajar y ser responsables. De alguna manera tenemos que abrir, la situación social del sector está realmente muy complicada. Y en este contexto todos tendremos que ajustar un poco para poder convivir con el problema”, enfatizó Mellano.
Además de bares y restaurantes, también se baraja la posibilidad de volver habilitar la actividad de carritos de comida rápida y food trucks, que cumplen con la condición de trabajar con espacios al aire libre.