Fuente: Clarín Gourmet by Daniela Gutierrez – Las más recientes aperturas donde comer desde risottos y pastas hasta suculentas carnes a la parrilla.
Rodeado del Río de la Plata y de las torres más altas de la Ciudad, Puerto Madero es un polo gastronómico tradicional que, aunque fue muy golpeado por la pandemia, se vuelve a mostrar vigente y renovado con restaurantes, bares y cafeterías multitarget.
Desde sus inicios -en los 90- este barrio ostentó propuestas atractivas para comer y beber. Pero el público era en su mayoría turistas y ejecutivos que trabajaban en las oficinas cercanas por lo que los restaurantes eran tradicionales y con un ticket elevado.
Con el tiempo fueron sumándose cadenas y otras propuestas más populares de comida rápida que diversificaron la zona. Hoy Puerto Madero tiene opciones para todos los gustos y recientemente volvió a incorporar nuevos restaurantes atractivos para un público de gustos clásicos: comensales de buen poder adquisitivo y turismo internacional.
Cómo cambió la oferta de restaurantes y bares de Puerto Madero
Las cervecerías: parte de la cara informal de Puerto Madero.
La pandemia impulsó el cambio con la reducción del turismo: muchos restaurantes se vieron obligados a cerrar y el ambiente -que ya venía transformándose desde años anteriores- mutó radicalmente. Puerto Madero se convirtió en una zona que los comerciantes describían como ‘fantasma’, sin turistas, ni oficinistas ni asistentes a eventos empresariales, los clásicos visitantes de sus bares y restaurantes.
Pero la llegada del Covid-19 no fue la única causa, la construcción del Paseo del Bajo -obra que demoró 28 meses- ocasionó un gran descenso de clientes. Además, desaparecieron 4000 espacios de estacionamiento, un punto a favor que los restaurantes perdieron.
También, debido a la apertura del Movistar Arena, el nuevo estadio en Villa Crespo, disminuyó la cantidad de espectáculos realizados en el Luna Park, lo que impactó en el número de visitantes de Puerto Madero.
El Dorado, un desembarco pospandemia en Puerto Madero.
La situación provocó el cierre definitivo de grandes clásicos de la zona como Bahía Madero, Sottovoce, Le Grill y La Dorita. Otros tuvieron que mudarse de local. Este último es el caso de La Parolaccia que cerró Casa Tua y se mudó a la calle Olga Cossetini con Parolaccia Madero Downtown.
La pospandemia trajo más propuestas para el público joven. En pleno confinamiento (diciembre de 2020) apareció Osten, inspirado en la novela de Scott Fitzgerald “El Gran Gatsby”, este restaurante elegante con bar de alta coctelería fue reconocido entre los mejores de América por su impactante diseño.
Otro hito en la transformación de la zona fue la llegada de El Dorado a fines de 2021. El restaurante de Germán Sitz y Pedro Peña con guiños irónicos a los noventa en la carta y en la ambientación. Y por supuesto, se multiplicaron las cervecerías con propuestas más informales y los cafés de especialidad con ofertas tentadoras en pastelería.
Pero los últimos meses volvieron a inaugurarse restaurantes destinados al público tradicional del barrio: clientela de gustos clásicos y alto poder adquisitivo y/o turistas que se ven seducidos por propuestas como Madero Gol (Alicia Moreau de Justo 2092), un restaurante temático que rinde tributo a la pasión futbolística es su ambientación y un museo con camisetas y objetos de ex jugadores.
Las más recientes aperturas de Puerto Madero
1- Cauce
Las carnes son protagonistas en Cauce, en Puerto Madero.
Este local abrió a fines de 2022 y allí las carnes son protagonistas. Los 5 socios que dirigen este local cuentan con historia gastronómica: “Nos juntamos con un mismo objetivo, abrir una parrilla restaurante premium, de gran nivel en cuanto a servicio, calidad de producto, coctelería y ambiente”, explica Leo La Regina, socio fundador de Cauce.
Para lograr ese objetivo convocaron a expertos en cada área. “Contamos con una carta de vinos diseñada por el sommelier Rodrigo Calderón, los cócteles están a cargo de Mona Gallosi y la cocina de Nero Cocina”, describe La Regina. El diseño interior y la arquitectura del restaurante estuvo a cargo del reconocido Santiago Jovenich y Gonzalo Arana de Estudio Arana.
“Es un ambiente cálido, con mucho diseño, apuntamos a un público exigente, intentamos crear una experiencia única desde que el cliente entra a Cauce hasta que se va”, enfatiza. Además fueron apadrinados por Manuel Mosquera, socio fundador de clásicos como Selquet, Rond Point, La Farola, Babieca, Ayres Criollos, Sorrento -entre otros- que los acompañó y aconsejó en el proceso de creación del local.
Los tragos de Cauce en Puerto Madero.
El plato estrella de la casa es el chuletón de bife ancho madurado al estilo español ($ 8.200). Se trata de un corte proveniente de animales de raza Shorthorn, alimentados 100% a pastura, criados en Ayacucho, Provincia de Buenos Aires. La segunda recomendación es el ojo de bife ($ 4.700) de 500 gramos también producto de su hacienda.
Para acompañar las carnes sugieren guarniciones clásicas como papas fritas ($ 1.100), ensalada de papa y huevo ($1.500). También sirven propuestas más innovadoras como el puré de batatas y toffee ($1.400) o las zanahorias con yogur griego y garrapiñada con pimentón de Cachi ($1.900).
Además ofrecen platos cocidos al horno como la panceta glaseada por 12 horas que se sirve con puré de batatas y toffee ($ 4.200). Como opción a las carnes hay pastas y, para finalizar postres clásicos.
Cauce. Av. Alicia Moreau de Justo 440. WhatsApp: 11 3311-3691. IG: cauce_ba.
2- Ángolo
Ángolo. Puerto Madero.
La propuesta de Ángolo es 100 por ciento italiana. Este espacio abrió a fines de diciembre y ocupa un local sobre Alicia Moreau de Justo donde durante años estuvo la cadena de hamburguesas Burger King.
Se trata de un emprendimiento familiar, los socios son primos y hermanos, que también tienen a su cargo el restaurante Fiume, en el mismo barrio. Al pensar en la propuesta gastronómica los socios soñaron con rememorar los sabores que disfrutaron a lo largo de su vida en las largas mesas familiares.
La carta la diseñaron junto a Maxi Loschiavo, reconocido asesor gastronómico que trabajó con Donato De Santis. Buscaron que no sea muy extensa para poder lograr la calidad deseada en cada plato.
La entrada de Ángolo, en Puerto Madero.
Allí aparecen platos típicos como los arancini que se sirven con tomate fresco, alioli y olivas negras. Estas croquetas están rellenas de ragú de hongos y queso mozzarella ($ 2.600). Otra entrada tentadora es la melanzane, es la clásica berenjena ahumada y grillada con pesto de tomates secos, pistachos y albahaca fresca ($ 1.600).
Entre los principales tientan los risottos: uno de hongos con trufa y otro de langostinos a la lima ($ 3.800 y $ 3.300). Y como era de esperar, hay pastas caseras. Entre ellas se destacan los papardelle de remolacha con queso patagonzola ($ 2.800) y los tortelloni de hongos con una emulsión de manteca trufada y brotes verdes ($ 4.100).
Ángolo es de los mismos dueños del restaurante Fiume.
Además hay pesca del día y carnes. Entre los postres aparecen los clásicos como el tiramisú o la panacotta. De lunes a viernes, al mediodía ofrecen un menú ejecutivo por $ 3.700, la propuesta se cambia todos los días e incluye plato principal, bebida y postre.
Ángolo. Alicia Moreau de Justo 292. Instagram: @angolo_ba
3- Campobravo
Las carnes del steakhouse Campobravo.
Desde 2002 Campobravo se destaca como steakhouse con cocina internacional, pero hace cuatro años reconvirtió su carta para hacerla 100 por ciento gluten free. Su primera sucursal fue abierta en el barrio de Las Cañitas, luego Palermos Hollywood y Las Lomitas. A Puerto Madero arribaron en octubre de 2022.
La especialidad son las carnes: “Cada corte tiene un tratamiento único, en cuanto al tiempo de estacionamiento y maduración, lo que nos garantiza un perfecto equilibrio entre sabor, terneza, textura y calidad”, declaran. Entre los cortes más vendidos está el ojo de bife de 350 gramos por ($ 2.840).
Los platos de Campobravo son gluten free.
También se destacan las pastas, entre ellas los sorrentinos de lomo gluten free, con salsa de hongos secos al vino blanco ($ 2.450). Además de una carta libre de glúten cuentan con postres sugar free, lo que significa que ningún azúcar ni ingrediente que contenga azúcar fue agregado durante su proceso de producción.
La estrella entre los postres es el New York Cheesecake, elaborado con lima, y endulzado con stevia y salsa de frutos rojos ($ 1350).
Campobravo. Pierina Dealessi 340. Instagram: campobravoarg
4- Italpast Faena
La famosa «Lasagna Della Nonna» con jamón, mozzarella, salsa de tomates y bechamel que sirven en Italpast.
En noviembre de 2022 el antiguo bistró del hotel Faena se convirtió en Italpast Faena Buenos Aires, una colaboración (por tiempo indeterminado) del reconocido restaurante italiano ubicado en Campana con el hotel del empresario Alan Faena.
Allí sirven platos clásicos de la cocina italiana combinados con otros que fueron diseñados especialmente para el lugar. El chef Pedro Picciau incluyó en la carta lasagna de la Nonna, los ravioles, que vienen rellenos con hongos, champignones, parmesano y lomo, con una masa que es verde «porque la hacemos con rúcula» describe, y se sirven con salsa pomodoro.
Los domingos en el almuerzo, además de los platos mencionados, se puede disfrutar de antipasti como los buñuelos de brócoli, croquetas de espinaca y olivas apanadas y rellenas de carne, o la burratina con rúcula, tomates secos y pesto.
El chef Pedro Picciau en el salón del Italpast Faena. Foto German Garcia Adrasti.
Además de la pasta ofrecen un bife de chorizo que se macera durante 10 días con un polvo de hongos de pino y funghi porcini, se sirve con un puré de ajos. Para finalizar la comida no pueden faltar el Vulcano di Cioccolato, Tiramisú, Panna Cotta y Pan Dulce con helado.
Italpast Faena Buenos Aires. Juana Manso 1450. Reservas: +54 11 4199 4294. Email: reservasuniverse@faenahotels.com.