Fuente: Cronista ~ Atiende a grandes artistas tanto nacionales como internacionales. Este bar se encuentra lleno de caras conocidas, tragos increíbles y la mejor hamburguesa de Buenos Aires, creada en el 2012.
Recibiendo artistas de la lista A tales como: los Jonas Brothers, Luis Miguel, Ricky Martin, los Red Hot Chilli Peppers; hasta transitado por clásicos como Rod Stewart y los Rolling Stones. Incluso miembros de la realeza: como el rey Felipe de España y la reina Letizia han tomado algo allí. Sin ir más lejos, hasta la reina Máxima de los Países Bajos sostuvo reuniones de trabajo en sus mesas.
Un bar estrella en pleno Recoleta
Ese es Pony Line Bar, un bar que se asoma dentro del Four Seasons Hotel. Pero no es cualquier bar: serán sus cócteles, su comida o su ubicación, pero Pony Line es buscado por la jet set. Desde empresarios hasta modelos, desde banqueros hasta celebrities.
Sin embargo, para entrar no es necesario ser un ‘Very Important Person’ (VIP). A pesar que el look que suele encontrarse es elegante, se manejan sin reservas y la idea de cruzarse con caras conocidas en sus «caballerizas» (privadas para unas 10 personas como máximo), suma a la hora de atraer al público local.
Jamás anunciarán quiénes están, aún cuando multitudes se agolpan en la puerta del hotel, como hace unos días con Maroon 5. Lo que sí, se sabe que dentro del bar, a las celebrities no se les toma fotos ni se les piden autógrafos; como regla principal es que esté quien esté, todos son iguales. Son códigos no escritos del bar, que es el más codiciado y donde la discreción es prioridad.
Cumpleaños número 10: desde el comienzo hasta hoy
Se comenzó a construir en 2011 y abrió a finales de 2012, formando parte del Four Seasons Hotel Buenos Aires. El especialista gastronómico Juan Gaffuri, director de alimentos y bebidas y chef ejecutivo de allí, ingresó en diciembre de 2000, previamente a formar parte del Four Seasons.
Como todo hotel cinco estrellas, era indispensable que hubiera un bar donde la créme de la créme pase el rato post show. En su momento funcionaba Le Dome, del restaurante Le Mistral. Luego, se cambiaron las ubicaciones y Le Mistral pasó a ser Pony Line y donde estaba Le Dome (por detrás) hoy está Elena».
Su creación giró en torno a un concepto: El nombre «Pony Line» está inspirado en el polo, y eso se debe a que su propietario NdR, el dubaití Alí Albwardy, es amante del deporte. Hasta la decoración del lugar gira a su alrededor:
- Con establos
- Pisos de establos
- Cinchas colgando en el techo
- Accesorios de frenos de los caballos
- Materiales como cuero
- Madera entarugada así como texturas rústicas
La famosa hamburguesa de Pony Line
Con la idea puesta en enfocarse en un público local, con jóvenes que vayan a pasarla bien y que disfrutaran de la buena comida. Un bar trendy, que reflejase a la ciudad conocida por el polo a nivel mundial: casual, pero chic, con comida rica, fácil de comer y que la gente disfrutara.
Entre citas y reuniones de trabajo, nada de salsas que chorrean ni de sabores demasiado intensos. ¿Su especialidad? Los sándwiches. Desde el primer día se dedicaron a buscar la mejor hamburguesa y lo lograron. Fue así que la burger de Pony Line se convirtió en leyenda.
La creación surgió en 2012, cuando aún no existía el auge por las hamburguesas. Su carne, de 250 gramos, es de una mezcla que hacen allí, además de tener también la dry aged. Es considerada la vedette de la noche y se acompaña de un pan con una costra de queso cheddar, que le da ese sabor tan rico y único.
En Pony Line Bar también rankean sus helados, los Dolce Morte propios del Four Seasons Buenos Aires. Pero como todo bar: la comida exquisita se acompaña de la mano de la coctelería, con un trabajo fino que tiene detrás.
Los hoteles ofrecían pura cocina internacional: sobre todo comida Mediterránea; pero la gente local no pisaba el hotel, solo los mediodías por reuniones. Es por eso que desde el momento uno se buscó apuntar a un público local y que el turista buscase cocina local. Así surgieron la hamburguesa, las empanadas de carne y la codiciada tabla de picada con panal de miel.
Es uno de los pocos en el mundo de los hoteles reconocido por nombre propio, y reabrió sus puertas en octubre del 2021 post pandemia. Tras un año y medio cerrado, cuentan que su meta es retomar sus horarios todos los días hasta la madrugada.
Las caballerizas, que son privadas para unas 10 personas, son muy buscadas a la hora del perfil super bajo; sus paredes guardan las mejores anécdotas. Es que sí, su público es parte de la mística de Pony Line: uno selecto, con vecinos, clientes fieles y huéspedes.
Horarios y ubicación
- Posadas 1086
- Martes a jueves de 16 hs a 01 hs
- Viernes de 16 hs a 02 hs
- Sábados de 17 hs a 02 hs
- Instagram: @ponyline.bar