Fuente: La Nación ~ Este viernes 20 y sábado 21 habrá shows de música en vivo, degustaciones, clases de cocina y muchas ofertas para aprovechar en los mercados y patrios gastronómicos de la ciudad.
Basta con revisar la cantidad de personas que recorren los mercados y patios gastronómicos de la ciudad para comprobar la transformación que estos espacios aportaron al turismo urbano. Esa combinación de venta de comestibles, servicio de mesa y actividad cultural que hoy ofrece la mayoría vino a revitalizar sitios históricos y fomentar nuevos circuitos de consumo en barrios que los vecinos quizá no explorábamos, tanto que ahora resulta un planazo ir con amigos a comprar un queso, apreciar la arquitectura restaurada y de paso sentarse en alguna de las cafeterías que ofrece el mercado de Belgrano, por ejemplo; o visitar el Smart Plaza de Parque Patricios, la primera plaza de comidas tecnológica de América latina donde el comensal puede elegir el menú en el camino y retirarlo apenas llegue al lugar, sin hacer fila y con solo bajar una aplicación. Todo eso y más se podrá disfrutar en Pintó Mercados y Patios, una nueva iniciativa de BA Gastronómica que tendrá lugar este viernes 20 y sábado 21 de mayo en once de los espacios más lindos de Buenos Aires. Más de 100 puestos participarán en el evento con degustaciones, shows de música en vivo y clases de cocina, una gran excusa para conocer esos lugares pendientes además deaprovechar promociones y descuentos.
De la propuesta participan los mercados de Belgrano, San Nicolás; el de Economía Solidaria de calle Bonpland, el de Carruajes, el Mercat de Villa crespo, el de San Telmo y el de Soho más el Patio de los Lecheros, Smart Plaza Patio Parque Patricios, Patio Costanera Norte y Patio Rodrigo Bueno, cada uno con su particularidad y oferta de productos.
LA ÚLTIMA GRAN REINVENCIÓN
Los mercados tradicionales, aquellos donde iban nuestras madres a comprar y a socializar – pues ahí se compartían chismes y recetas que luego serían populares – han evolucionado de forma constante adaptándose a las necesidades de cada época, como la refrigeración, las normas municipales de saneamiento y los cambios en la venta al por mayor y menor que luego impactaron en nuestra forma de comprar y consumir. Su última gran reinvención fue apurada por el Covid y la tecnología, dice un informe reciente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Ahora los mercados tienen Instagram y cada puesto gestiona sus ventas y envíos desde su propio perfil, una modalidad poco extendida hasta antes de la pandemia, y un notable avance.
Si bien los procesos de rezonificación de los grandes mercados donde se abastecían los minoristas (restaurantes y almacenes) implicó que muchos fueran trasladados a las periferias (caso del Abasto, por ejemplo, que mutó en el Mercado Central), los pequeños resistieron a duras penas mientras crecían las cadenas de supermercados. Ante esa competencia y la falta de la clientela habitual, a fines del siglo pasado tanto públicos como privados empezaron a modernizar sus instalaciones y plegarse lentamente a distintas iniciativas para mantenerse vivos. Podríamos citar el caso de San Telmo. En los últimos años, y pese al disgusto de muchos clientes de la zona acostumbrados al antiguo formato y a la relación con puestero amigo, fue rediseñando la oferta de rubros hasta lograr un cierto equilibrio, a tono con los tiempos que corren. Hoy es un gran patio de comidas donde también se puede conseguir ropa, curiosidades y objetos vintage, además de productos frescos y las mejores carnes de los alrededores, como las que ofrecen Ángel y José Luis en el puesto 54, por citar uno de los puestos más antiguos.
Hábitos de alimentación saludables
Pasado lo peor del aislamiento, los mercados (y los patios también) vuelven al centro de la vida comunitaria con un rol fundamental por delante: contribuir a crear hábitos de alimentación más saludables, conectar mejor a la ciudad con los proveedores rurales, poner en valor al artesano y generar negocios más justos para toda la cadena, describe el trabajo del BID.
Acorde a eso, Pintó Mercados y Patios se propone seguir impulsándolos como parte de la experiencia urbana. El evento arranca este viernes 20 y se extiende hasta el sábado 21. Imperdibles son todos los espacios convocados: el Smart de Parque Patricios tiene un gran parque a pocos metros y una milonga al aire libre que se arma los sábados (de paso se toman una clase); Mercat villa Crespo, de las inauguraciones más recientes, ofrecerá menús desde los $1100 más regalos en algunos puestos y shows gratuitos (viernes desde las 21.30 Ostinelli Arce Berazza Trío, sábado mismo horario Humanizando el algoritmo).
El mercado de economía Solidaria de calle Bonpland ocupa un antiguo edificio de Palermo y se distingue por su gran variedad de alimentos y artículos agroecológicos, además dictan talleres, charlas y actividades culturales propias. El de Belgrano, ubicado en Juramento y Ciudad de la Paz, fue construido en 1891. Tiene una superficie de 9000 metros cuadrados y en 2019 – justo antes de la pandemia- se terminaron las obras de puesta en valor que sumaron terraza y patio de comidas al aire libre. El de San Telmo, cuya fachada será remodelada dentro de un plan de obras en el barrio, data de 1897 y es una joya diseñada por el arquitecto Juan Antonio Buschiazzo. Destacan sus techos con vigas y arcos decorados, vidrio y una gran cúpula central.
Para saber más sobre la agenda de actividades puede escribir al BOTI, el WhatsApp de la ciudad, chateando al 11-5050-0147.