Fuente: Clarín Gourmet by Gimena Pepe Arias – Corría el año 1989 cuando dos amigos decidieron abrir una parrilla de barrio. Sin muchas pretensiones más que ofrecer buenos productos a los vecinos y comerciantes. El éxito impensado llegó muy pronto y desde su apertura trabajaron con salón lleno: hoy hacen once mil cubiertos por mes.
A los clásicos cortes de parrilla se sumaron platos de cocina bien caseros y, aggiornándose a la época, las carnes maduradas que se las puede ver exhibidas en grandes refrigeradores alemanes en el salón.
Debido a la gran convocatoria que tienen, y a pedido de los clientes, han implementado un sistemas de reservas que ofrece solo una parte de los 140 cupos posibles. La oferta se abre el martes a las 9 de la mañana y toman horarios para toda la semana. En dos horas se agotan los cupos para los próximos seis días. De todas maneras, se forman largas filas de ansiosos comensales a diario.
Cómo es Don Zoilo, la parrilla del barrio de Villa Crespo
En sus inicios, la esquina de Honorio Pueyrredón y Luis Viale, tenía una capacidad para 90 cubiertos. La parrilla que sólo ofrecía carnes y ensaladas tenía mesas vestidas con manteles de colores y con motivos cuadrillé que con los años se transformaron en blanco impoluto.
En el año 2015, se decidió ampliar la capacidad y el local cambió por completo. Se sumaron 50 plazas llegando a las 140 actuales y el nuevo salón comedor pasó a ser el preferido de todos los comensales.Parrilla Don Zoilo.
Mauro Cisterna, gerente general de Don Zoilo, cuenta que por lo general cuando un restaurante o una parrilla se extiende en busca de nuevos espacios no queda tan lindo como el original. “Acá, fue al revés. La gente quiere venir a la parte nueva porque quedó muy bien”, dice.
El salón es muy grande pero está dividido en sectores, lo que favorece a la acústica y privacidad de las mesas que están suficientemente separadas entre sí, pensando en la comodidad de la gente. Un jardín vertical interior irrumpe en el blanco predominante y aporta calidez y color vivo. También cuentan con un sector con techo de vidrio, para ver el sol o las estrellas.Restaurante Don Zoilo Foto: Fernando la Orden
El servicio es atendido por mozos de oficio, algunos de ellos ya con 3 décadas de experiencia en la parrilla de Villa Crespo. Camisa, moño, carta aprendida y recomendaciones para no pedir de más, son algunas de las características de los camareros.
A pedido de los clientes habituales la carta también fue mutando a lo largo de los años. El fuerte innegable es la parrilla, a la que se sumaron platos de cocina como milanesas y pastas caseras. Las últimas en llegar fueron las carnes maduradas que se incorporaron hace dos años. Carnes maduradas, lo nuevo de Don Zoilo Foto: Fernando la Orden
Las imponentes las heladeras de tecnología alemana que se encuentran a la vista, en pleno salón, son punto de fotos y selfies. Allí reposan las carnes de 45 a 60 días. “Las heladeras controlan la humedad, el viento y la temperatura, con filtro de carbón, una luz ultravioleta para que no generen bacterias”, explica Cisterna. Siempre hay cola en Don Zoilo.
Y continúa: “Se va secando y madurando en seco. Pasado el tiempo necesario, se le saca el hueso, y las dos partes secas de las puntas. Por dentro, la carne está roja como el primer día claro. Se rompieron las fibras, está mucho más tierna y mucho más sabrosa”
La clientela habituada a comer los cortes de carnes asados al carbón y leña de espinillo fueron medio reticentes a la carne estacionada por dos razones: es un producto desconocido y el precio. “Por lo general, estos tipos de cortes madurados cuestan el doble que un corte común, pero en Don Zoilo cuestan solo un 30% más”, señala el gerente.En Don Zoilo las carnes se sirven con tres mini guarniciones. Foto: Instagram
“No fijamos en los detalles, queremos que los clientes no solo coman comida rica, sino que sientan la experiencia completa: que no haya olor a comida en el salón, nos fijamos que las mesas estén firmes y no se muevan, que estén lo suficientemente separadas para no escuchar conversaciones ajenas”, concluye Cisterna.
Qué comer en Don Zoilo
Si bien el menú es el mismo, los precios difieren al mediodía y a la noche. En la carta diurna, los cortes de carne incluyen guarnición (papas fritas, ensalada o puré). Todos los platos son abundantes y aseguran que muy pocos clientes pueden terminar un plato de pastas.Los famosos bocaditos de acelga. Foto: Instagram
De las entradas se destacan los bocaditos de acelga ($ 4.890/ $ 5.100), un plato imbatible que año tras año lidera las ventas. La porción tiene 8 buñuelos fritos que se acompañan con salsa filetto. También ofrecen burrata con jamón crudo, rúcula, tomates secos, aceitunas y albahaca ($ 7.690/ $ 8.200) y rabas ($ 8.680/ $9.250).Burrata de Don Zoilo. Foto: Instagram
De los cortes a la parrilla el asado de tira ($ 11.740/ $ 12.090) es el más pedido, tanto que venden 300 kilos por semana. Le siguen la entraña ($ 20.690/ $ 21.660) y el ojo de bife ($ 15.050/ $ 15.700).
También se lucen pescados a la parrilla. Hay salmón rosado ($ 19.960/ $ 21.900) y trucha ($ 13.890). Ambos platos se sirven con papines asados.Chinchulines de Don Zoilo. Foto: Instagram
En los platos de cocina sucede algo que sorprende a los cocineros. Incluso en verano, cuando el calor agobia y las temperaturas son muy altas, el plato estrella es el pastel de lomo al barro gratinado en horno de leña ( $9.200/$ 11.150). Se tarta de un pastel en vasija de barro que en lugar de la tradicional carne picada lleva lomo cortado a cuchillo. “Comen 2 personas tranquilas, tres también”, asegura Cisterna.
De las pastas (ofrecen 4 estilos y 7 salsas) los fusilli caseros al fierrito ( $ 8.790) se llevan todos los aplausos.Mozos de oficio en Don Zoilo. Foto: Instagram
Los postres son tradicionales. Se pueden ver opciones como flan o budín de pan ($ 2.700/ $ 3.150), queso y dulce ($ 3.850/ $ 4.200) o tiramisú ($ 4.100/ $ 4.510)Tiramisú, un postre muy pedido. Foto: Fernando la Orden
Todas las semanas, en el pizarrón sugieren una entrada, un plato principal, un postre y un vino invitado, que no están en carta.
La carta de vinos se amplió después de la pandemia y ofrece opciones que van desde los $ 5.000 hasta los $ 30.000. Quienes quieran vino de un nivel superior pueden pedir la carta exclusiva y obtendrán información de más etiquetas.
Don Zoilo. Abierto de martes a domingos 12 a 16 y 20 a 01. Av. Dr. Honorio Pueyrredón 1406, Villa Crespo. Reservas solo vía telefónica: 4588-1194.