Fuente: La Nación ~ Nuevas generaciones de veganos, vegetarianos o flexitarianos están modificando aceleradamente la matriz de demanda de alimentos.
Los consumidores han puesto la lupa en los productos que se consiguen en la góndola, analizan el origen, su packaging, la huella de carbono o hídrica que generan. Estas nuevas demandas tienen su correlato en las tecnologías que surgen para desafiar a los métodos tradicionales de producción y distribución de los alimentos.
Por eso no resulta extraño que las startups foodtech conquisten el mercado y a los fondos de inversión. Según el informe FoodTech Landscape in Latin America publicado por Endeavor, las startups de este vertical han recaudado US$1,700 millones en capital de riesgo, 64% de los cuales, sucedió en los últimos dos años, es decir, durante los mayores picos de la pandemia por Covid-19.
“Se viene hablando mucho acerca de este vertical. No es una moda, es una tendencia. Nuevas generaciones de veganos, vegetarianos o flexitarianos están modificando aceleradamente la matriz de demanda de alimentos. El cambio en los hábitos de consumo es el factor clave del éxito que están teniendo estas compañías creadoras de alimentos a base de plantas tanto a nivel mundial como en Latinoamérica” sostiene Bernardo Milesy, Founder & Managing Director de Glocal.
Las foodtech toman el mercado
Ciertamente, los fondos de Venture Capital están destinando sus fondos de manera creciente a las foodtech y esto se refleja en el crecimiento de la oferta de las compañías. Sólo para dibujar el mapa del mercado mencionó las compañías que están creciendo en la región:
● Future Farm: produce carne vegetal y compite en países de Medio Oriente como Emiratos Árabes Unidos con marcas de Estados Unidos.
● Tomorrow Foods: startup argentina enfocada en producir soluciones plant based saludables y sustentables para la industria de alimentos y bebidas.
● Frizata: la compañía argentina que comercializa directamente a los consumidores sus productos congelados: desde frutas y verduras hasta hamburguesas y nuggets a base de plantas. Ofrecen productos de calidad, de sabor agradable y precio competitivo.
Un paso antes de llegar a la mesa
Si bien las startups foodtech crecen, también hay un sostenido interés de los productores y de los fondos de inversión en las soluciones de sostenibilidad que comienzan antes de que el alimento llegue a la mesa. Según Milesy, un claro ejemplo de esto es el trabajo que realiza ucrop.it, una plataforma colaborativa en la que los productores pueden medir y gestionar la trazabilidad de su producción.
Otra prueba de este interés en el cuidado del medioambiente es el crecimiento regional de Kilimo, la plataforma de monitoreo de riego que permite medir la huella hídrica en la producción de alimentos. También centrada en la calidad de los productos agroindustriales, se consolida la startup Zoomagri, que ya se encuentra en 14 países.
Sin dudas, la sostenibilidad tendrá un lugar preponderante en la agenda de la producción de alimentos en 2022 y las aceleradoras estarán acompañando con fondos y conocimiento a quienes emprendan: “Tenemos un propósito muy claro: impulsar el desarrollo de startups y la innovación en empresas y organizaciones, que posibiliten una mejora en la nutrición mundial a través de sistemas de producción sostenibles” explica Milesy.
El autor es socio de Barrero & Asociados