Fuente: El Marplatense ~ Una lucha. Es lo que tuvieron que afrontar los gastronómicos de Mar del Plata durante todo el 2020. Algunos no pudieron resistir los cierres y restricciones por la pandemia y lo hicieron de manera definitiva, y los que aguantaron, debieron soportar una temporada de verano para el olvido. De hecho, algunos de ellos no podrán atravesar el invierno.
Sobre estas y otras cuestiones relacionadas, el empresario gastronómico, Juan Rodríguez expuso sus sensaciones en los estudios de CNN Radio Argentina (FM 88.3) durante el programa Hora 13.
«La realidad es que la temporada no terminó ya que resta Semana Santa que es una fecha muy importante para la Costa Atlántica, porque es un fin de semana más largo de lo habitual y el consumo de pescado es notable en la ciudades costeras», apuntó.
Y en el balance de la temporada, Rodríguez aseveró que «respecto al 2020 enero no fue bueno, mientras que febrero mejoró un poco porque con el carnaval, la extensión horaria para bares y restaurantes, se pudo trabajar un poco mejor y en lo que va de marzo la estamos luchando con lo que va quedando».
Y aclaró: «En el contexto de la posibilidad de no haber temporada, esto es mejor que nada. Pero trabajamos un 50% menos que el año pasado y enero sufrimos la mala prensa y los anuncios de que se iba a cerrar la ciudad, con lo cual los turistas no vinieron».
En relación al comportamiento de la sociedad, el empresario sostuvo que «los casos van bajando y siempre fomentamos que con protocolo, todo y sin protocolo, nada. Así y todo es muy difícil controlar, la gente esta cada vez más relajada en los cuidados y se complica estar encima de las situaciones».
«Hemos hablado mucho con el Concejo Deliberante, pero pedimos muchas cosas dentro de una ciudad muy golpeada y hemos conseguido alguna quita de impuestos, pero no hay mucho margen. Se esperan más gestos de la clase política«, manifestó el empresario gastronómico.
Y si bien mantiene la esperanza, fue claro al reconocer que «se perdieron muchísimos puestos de trabajo en la gastronomía. Y después de Semana Santa se va a ver realmente lo que quede en pie en la ciudad. Hay muchos que no van a poder afrontar el invierno».
Por último, sobre las modificaciones que generó la pandemia en la gastronomía, Rodríguez fue determinante: «Hubo un cambio. La gente, al día de hoy, sigue con miedo y no sale a bares o restaurantes. Se generó un cambio de paradigma que va a tardar dos años en revertirse. Y en lo económico, la pandemia generó un derrumbe de la actividad. Hay negocios que no han llegado al 20% de lo facturado el año pasado».
Y cerró: «Fue una temporada para salvar la ropa, pero no estamos dispuestos a cerrar nuevamente. No tenemos la posibilidad económica para afrontar otro cierre y sostener una estructura«.