Fuente: La Nación ~ La provincia trabaja en ensayos para realizar los primeros envíos de cebolla dulce a los Estados Unidos, muy requerida en ese país; busca captar parte de la oferta Perú, primer productor en la región
Mendoza busca dar un salto en la matriz exportadora de alimentos frescos. Así, la cebolla dulce -no es picante y tiene menor contenido de azufre- aparece con fuerza en escena, avanzando con pruebas piloto de cultivos orgánicos y un inminente envío de las primeras producciones a los Estados Unidos. Desde el norte del continente miran desde hace un tiempo con buenos ojos lo que la tierra cuyana tiene para darle a la gastronomía mundial.
Comida rápida, supermercados y restaurantes son los destinos a los que se apuesta con la producción local. Hasta el momento solo se vienen realizando algunas producciones a menor escala en el norte provincial, San Juan y Santiago de Estero. A corto plazo, se obtendrán los primeros resultados de un proyecto que busca posicionar a Mendoza y a la Argentina como una alternativa más en la producción de este alimento ante la gran demanda internacional.
“En contratemporada, el producto es muy demandado en Estados Unidos, principalmente, y podría ser una alternativa para la diversificación de la matriz exportadora de nuestra provincia. Este es un producto muy particular y demandado por grandes mayoristas vinculados principalmente a la gastronomía”, explicaron a LA NACION desde el Ministerio de Economía de la provincia.
Técnicos de ProMendoza, organismo público y privado que impulsa las exportaciones locales, y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), vienen trabajando en conjunto con pruebas de cultivo de cebolla dulce a pedido de la empresa norteamericana Generation Farms, ubicada en el estado de Georgia, EEUU, y que se encuentra muy interesada en invertir en la Argentina, según las autoridades mendocinas.
El ensayo lo vienen llevando a cabo tres productores: Agro López, MAF, de Miguel Ángel Fernández, y Agropecuaria María Vicente. Así, todo está encaminado para habilitar un nuevo negocio permanente de exportación de la cebolla suave. Bajo este escenario de posibilidades aparece la figura de Nicolás Musa, director de Desarrollos Agrícolas de Fresh Garlic Produce Corp. y Agrícola Markalen, quien está detrás de los avances logrados hasta ahora. De hecho, Musa es el encargado de la coordinación de los productores.
“La Argentina necesita reactivar su potencial agroexportador de economías regionales invirtiendo en proyectos como el de cebolla dulce, que permitan integrar a futuro su mercado interno y oferta exportable de valor, generando un feedback positivo en la cadena productiva”, indicó Musa, quien confirmó a LA NACION que en un par de semanas se cargará el primer container de cebollas dulces clasificadas y listas para embalar, rumbo a los Estados Unidos, vía Chile. “Estamos con muchas expectativas y deseos de que sea exitoso este desarrollo”, contó.
El empresario mendocino busca que la provincia cuyana logre avanzar con el proyecto por destacarse en su parte cualitativa, lo que permitirá abrir el juego a más productores locales. “Si logramos ese objetivo, vamos a lograr introducirnos con este producto en el mercado de consumo norteamericano. A partir de allí, buscamos avanzar en el desarrollo de productores que cumplan con los niveles de calidad exigidos en EEUU”, destacó Musa.
Para los expertos en la materia, la cebolla dulce es una oportunidad para la provincia cuyana, más allá de la existencia de competidores en la región. De hecho Perú es el primer productor, con más 5000 contenedores exportados por temporada; unas 140.000 toneladas.
Desde el INTA señalaron que no es la primera vez que se hacen estos ensayos. Sin embargo, esta vez el organismo nacional le sugirió a los inversores que se realizara el proceso productivo, logístico y comercial con el fin de concretar la prueba completa de la cadena de exportación, desde el cultivo en Argentina hasta el desembarco en EEUU.
“De esta manera, podrá evaluarse el costo de producción, el rendimiento de kilos por hectárea, la calidad y el estado del producto en el momento del desembarque, así como testear la eficiencia. Desde 2010, se han hecho varias pruebas de cebolla dulce, pero en Mendoza los suelos le otorgan a la cebolla un grado de pungencia, esto es picor o ardor, que le quita suavidad a esta variedad. Es por ello que el campo de prueba se amplió también a Santiago del Estero y San Juan, con la intención de minimizar el picor”, explicó Aldo López, investigador del INTA y asesor técnico del proyecto. Por tal motivo, se compraron en Holanda semillas híbridas, para asegurar una cebolla dulce, y se implantaron entre 12 y 15 hectáreas. La inversión total de la prueba con el producto ya colocado en Estados Unidos se estima en alrededor de 100.000 dólares.
Objetivo
Desde la cartera económica provincial, indicaron que si este negocio prospera, en un plazo de 3 a 5 años se podría contar con una amplia área cultivada de cebolla dulce. El objetivo, en principio, es captar entre 5 y 10% de la oferta actual de Perú; esto es 250 a 500 contenedores por temporada.
Producir en contraestación al hemisferio norte es una gran oportunidad de negocios para Mendoza y en el caso de los alimentos frescos, los acuerdos previos son imprescindibles, porque el producto es perecedero. “La cebolla dulce es un producto de invierno para nosotros, de marzo a octubre, y puede exportarse en un contenedor refrigerado, al igual que el ajo”, indicaron desde el Ministerio de Economía.
Gerardo Arribas, responsable del Sector Alimentos Frescos de ProMendoza, resaltó “el esfuerzo que hacen las empresas privadas para generar inversiones, ya que realizan una apuesta riesgosa que puede dar buenos frutos a futuro”.
“Desde ProMendoza seguimos en la búsqueda de captar inversiones para obtener dólares genuinos para Mendoza y seguir creciendo en exportaciones, diversificando la matriz exportadora de alimentos frescos de la provincia”, sumó Arribas.
La cebolla dulce es un producto de invierno, de marzo a octubre, y puede exportarse en un contenedor refrigerado, al igual que el ajo
Por eso, en esta tarea de articulación entre el sector público y privado, ya se trabaja en las próximas medidas, vinculadas al financiamiento.
En los últimos días se produjo un nuevo encuentro que le permitió a una empresa mendocina con base en los Estados Unidos conocer los detalles del programa de fomento a la inversión privada Mendoza Activa 2, que devuelve el 40% de la inversión realizada (10% en billetera virtual, 10% en efectivo y 20% en crédito fiscal), indicó Valentina Navarro Canafoglia, titular de Agricultura de la provincia.
“Buscamos darle mayor impulso y plataforma local mediante ayuda financiera al sector que permita perfeccionar específicamente el tema agrícola a productores. Pretendemos que no se pierda el entusiasmo inicial que está atado a un proceso de validación del producto. Tratamos de que los clientes sientan que se están haciendo las cosas bien y que hay un futuro en el programa. Es un concepto, una cultura de trabajo que estamos intentando incorporar en el sector”, señaló en tanto el coordinador de los productores.
Por otro lado, se busca impulsar al sector a través de un programa de difusión para dar a conocer los beneficios del consumo de este producto en Mendoza, con el objetivo de empezar a fortalecer el mercado interno.