Fuente: Clarín / EFE ~ Ya no hace falta imaginarse cómo serán los platos que aparecen en la carta de un restaurante, ya que de la física en papel se pasó a la disponible en código QR por la pandemia y ahora se da un nuevo salto con la realidad aumentada, que dispone cada elaboración en 3D en la mesa del comensal antes de pedirla.
La innovación parte de 80 grados, grupo con cuatro restaurantes en Madrid capitaneado por los cocineros y socios José Manuel Vidal y Óscar García que acaba de instaurar una carta de realidad aumentada que permite al comensal ver en 3D la comida que quiere pedir.
El afán por la digitalización y el sorprender siempre al cliente es lo que les ha llevado a implantar esta nueva modalidad en la carta de sus locales: Con la pandemia y la sustitución de las cartas en papel por códigos QR decidimos utilizar las nuevas tecnologías para darle una forma más divertida y original a la presentación de nuestros platos, señala a Efe Vidal.
De esta manera, los restaurantes 80 grados se convierten en los primeros en usar esta aplicación, que según cuenta el cocinero, se ha hecho añadiendo al código QR una nueva tecnología de AR, de forma que se podrá visualizar lo que se quiere comer antes de pedirlo e incluso verlo preparado en el plato a tamaño real y encima de la mesa.
Esta tecnología se aplica a todos los platos de estos restaurantes y añade la información nutricional (valor energético, grasas saturadas o azúcares) y los alérgenos.
Lo bueno de esta carta es que va a ayudar a los comensales a ver lo que pueden pedir y se van a atrever a probar cosas nuevas, no van a ir a lo típico. Porque antes escrito o con una foto no transmitía de manera real lo que era el plato en sí, de esta manera se hacen a la idea y ven todos los ingredientes que llevan, explica García.
Gracias a esta innovadora carta los clientes sabrán la pinta que tienen las elaboraciones más pedidas de 80 grados, como el huevo trufado con patatas paja y jamón, la pizza «más fina del mundo» o el postre de leche con galletas, y de nuevas incorporaciones como el bocadillo negro de calamares, la lasaña de pato o los raviolis de chilli crab con salsa thai de cacahuetes.
La actual emergencia sanitaria, que ha golpeado duramente a la hostelería, no ha impedido que Vidal y García lleven sus ideas un paso más allá. Pensamos que cuanto peor vayan las cosas hay que invertir más, sobre todo en sorprender al cliente para que de esta manera el consumo se reactive, asegura Vidal.
Cinco meses han tardado en poner esta tecnología en la carta digital, que ya se encuentra disponible para todos los dispositivos móviles (tanto Android como iOS). Hemos dedicado mucho esfuerzo, sobre todo a la hora de adaptarlo técnicamente, porque no es sencillo pasar toda una carta a 3D. Tuvimos que hacer el diseño de los platos y paralelamente adaptar nuestra web, puntualiza.
Los cocineros y socios han sido los pioneros en esta nueva revolución digital gastronómica, pero aseguran que en cuanto haya empresas que se dediquen a pasar toda la carta a 3D y aparezcan herramientas mejores todo el mundo va a ir hacia la realidad aumentada; este sistema ha llegado para quedarse.
Mientas terminan algunos retoques tecnológicos, ambos disfrutan viendo las reacciones de los comensales al utilizar la aplicación. A la gente le sorprende mucho y se ríe, es una auténtica sorpresa, refiere Vidal.
Tal es el asombro de algunos, que el cocinero asegura que no solo entran en su web personas que viven en Madrid a ver sus cartas, si no que registran consultas desde Alemania, Francia, Reino Unido o China.
Las personas que vienen al restaurante mandan el código a sus amigos para que lo vean. Es increíble el interés general y la respuesta positiva que está dando, admite.