Fuente: Cronista ~ Se trata de Agua, la nueva propuesta de los creadores de Madrí, que tiene platos de distintos países del continente asiático: desde la India hasta Camboya.
Cuando pensábamos que ya lo habíamos visto todo en Palermo, un restaurante con una original idea nos dejó con la boca abierta. Se trata de Agua, una propuesta de comida asiática que ofrece «bites» o pequeños bocados que llegan literalmente flotando a los comensales.
Agua se suma así a la tendencia de locales con formato mostrador, donde los platos se exhiben y quedan al alcance de a mano de quien se tiente. Ubicado en El Salvador 5632, tiene una gran barra circular rodeada por un pequeño «río» donde los platos salen directo de las manos de chef y llegan flotando.
El agua es protagonista porque justamente trabajan con productos de materia prima acuática, de mar, río, o lago; utilizan pescados, maricos, algas.
En los «bites» hay influencia de la comida india, taiwanesa, coreana, china y más países. Se pueden encontrar desde dumplings (canastitas de masa de wantan rellenas de cerdo, langostinos y hongos), hasta butter chicken (un plato típico de la India con pollo embebido en pasta de tomates, crema, manteca y chiles) o nems (spring rolls de vegetales y hongos envueltos en papel de arroz frito, directo de Vietnam). Cada uno cuesta $ 600 y al final de la comida se cuentan los platitos.
Los platos principales cuestan en promedio $ 2500 y hay cuatro opciones: dancing Pad Thai, Amok (plato camboyano de curry de pesacado blanco y pak choy cocido al vapor acompañado con arroz), crunchy pork (cerdo curado, marinado en salsa asiática y horneado en costra de sal con puré de boniato), y yakiniku & tempura (un plato japonés de pinchos de lomo en salsa teriyaki acompañado con un mix de vegetales y setas en masa tempura).
De postre, el helado frito es su marca registrada; va apanado con coco rallado, panco, súper congelado y después frito a altas temperaturas. También tienen una gran variedad de tragos con toques asiáticos.