Fuente: La Nación ~ A las 17, la Plazoleta Julio Cortázar, conocida como Plaza Serrano, de Palermo, estaba medio vacía. Sin embargo, 30 minutos después la postal era otra: grupos de chicos empezaron a llenar el espacio para festejar el Día del Amigo, el segundo que se celebra en pandemia. Pero fue el primero con bares y restaurantes abiertos, aunque con aforo.
“El año pasado no lo pudimos celebrar y queríamos festejar este año, con los protocolos adecuados”, dijo Sharon, que estaba con sus amigas, Camila y Martina, en el bar Lado V (Honduras 4969). Hacía dos meses que no se veían. “A pesar del contexto de la pandemia, necesitamos también salud mental, despejarnos un poco con amigos”, señaló.
Desde el sábado pasado, la Ciudad flexibilizó las restricciones impuestas a los locales gastronómicos, que están autorizados a extender el horario de apertura hasta la medianoche y ampliar el aforo al 50% en los salones interiores. Además, se autorizan hasta seis clientes por mesa en los locales, y ocho, en el exterior.
Con cervezas en las manos, Gabriel, Ignacio, John y Matías se reunieron en Temple Bar (Costa Rica 4677). “Hacía un montón que no nos juntábamos y hoy era la excusa perfecta para tomar unas cervezas en compañía”, señaló Gabriel. “De a poquito vamos saliendo más. El año pasado no pudimos festejarlo”, agregó Matías.
Abril Taus estaba sentada en otra mesa del mismo bar, junto a sus amigos Jorge Hernández, Sofía Noez y Dafne Quiroga. “Es un día muy comercial, pero está bueno para juntarse. El Día del Amigo es todos los días, siempre están para confiar cuando uno pasa una situación fea. Quiero brindar por la amistad”, dijo mientras alzaba su cerveza y miraba a sus compañeros.
En La Puntita, un local que se dedica a la elaboración de waffles en Gurruchaga 1876, la fila daba la vuelta la cuadra.
“Todos los días viene mucha gente, pero no tanta como hoy [por ayer]”, aseguró Brian, el encargado del comercio, al dialogar con la nacion. “Para controlar el aforo interior, permitimos que haya cuatro personas por mesa y por 45 minutos”, afirmó.
Cintia Martínez, Jennifer Capia y Jessica Hidalgo aguardaban en la fila para entrar al local. “Somos amigas de la infancia y hacía más de dos meses que no nos juntábamos. Mantenemos siempre las precauciones y las tres estamos vacunadas, pero quisimos pasarlo bien un rato después del trabajo, ya que el año pasado lo pasamos encerradas y trabajando”, indicaron.