Fuente: IProfesional – La Fábrica busca franquiciados para desembarcar en todo el país. Con 30 años de experiencia, ofrece dos modelos de franquicias: activas y pasivas.
Fundada hace 30 años, la cadena de sandwicherías La Fábrica sigue expandiéndose. Siempre atentos al consumo de sus clientes lanzaron dos marcas más, La Popular, una cadena de sándwiches de bajo precio y Horneados, especializados en empanadas y tartas. Crecen a través de dos modelos de franquicias, la tradicional para quien quiere estar en el día del negocio y otra para inversionistas pasivos.
Fue creada por dos familias, Matyas y Bergoc, nació como una fábrica de repostería que vendía pastelería a cafeterías y restaurantes. Si había inflación, perdían márgenes y clientes, por eso decidieron poner una sucursal propia y vender pastelería y como gancho, sándwiches económicos. Aseguran que antes de su llegada, los sándwiches sólo se vendían a pedido. La idea tuvo éxito y hoy el 60% de su venta son sándwiches. La Fábrica cuenta con 33 locales, de los cuales 10 son propios y 23 franquiciados expandidos desde Zárate a La Plata y evalúan la posibilidad de desembarcar en otras provincias.
La Fábrica lanzó dos marcas: La Popular y Horneados
Para ganar mercado a fines de 2019 lanzaron La Popular. «Es una marca que surgió en los últimos años debido a la crisis, porque hay una parte del público que no podía acceder a comprar en La Fábrica. Los precios están entre un 30% y un 40% más bajos, depende el producto. Es diferente el packaging, hay menos variedad, el pan es más fino y tienen menos relleno, además de otra calidad de fiambre. Tenemos 7 locales, tres propios y cuatro franquicias. Por ahora no estamos dando franquicias de La Popular, estamos pensando en un cambio de imagen y luego nos expandiremos con ese formato», señaló Ariel Matyas, socio gerente e hijo del fundador de La Fábrica.
En el barrio porteño de Monte Castro, donde abrieron el primer local de La Fábrica, lanzaron en julio de 2023 Horneados con un nuevo concepto. Se trata de una nueva marca que ofrece empanadas y 20 variedades de tartas saladas. Están definiendo el negocio y los productos que venderán para poder expandirla y franquiciarla.
El hijo del fundador, contó cuál es la ventaja que tienen a la hora de competir «tenemos tres plantas propias, en una elaboramos panificados: pan de miga, medialunas, croissant, fosforito y todo lo de lunch. En el primer piso, hacemos los rellenos horneados: tarta, empanadas, pizzas, tortillas de papas y de verduras, pre pizza con muzarela y jamón frío, además de tortillas. La segunda planta es de repostería y ahí se fabrican tortas, tartas, masas, budines, muffins. La tercera planta es un frigorífico donde elaboran jamón feteado envasado y quesos cortados listos para usar en cada local. La panificadora está en Ciudadela y las otras dos en San Martín. A los locales llega todo listo para armar los sándwiches».
La Fábrica cuenta con 33 locales, de los cuales 10 son propios y 23 franquiciados
Si bien en 2008 llegaron a vender 40 millones de sandwiches al año, el consumo se retrajo y venden 10 millones anuales. Entre tortas y tartas vendían 20.000 unidades mensuales, ahora 5.000. Pero se las ingeniaron para reinventarse.
«Las empresas tienen que apelar a la resiliencia. Antes se vendían cajas de 50 sandwiches, ahora se venden más por docena. La gente festeja menos, las reuniones son más chicas. El contexto es lo que es, hay que repensar cómo llegar al consumidor. Ahora lanzamos sándwiches de milanesa, productos que sabemos se venderán, aunque sea un año duro. La historia de la marca hace que los consumidores nos reconozcan y prioricen», explicó Matyas.
Una franquica de la La Fábrica arranca en 28.000 dólares
Este año el foco es la apertura de más locales. En 2023 abrieron 5 locales de La Fábrica y este año proyectan abrir 10, 4 propios y 6 franquiciados. «Ofrecemos una franquicia de bajo costo, para abrir un local de La Fábrica hay que invertir u$s28.000, es un llave en mano, incluye equipamiento, marquesina, capacitación y acción comercial de inauguración. Se trata de un formato activo en el que invierte, trabaja en el local. Se necesitan cuatro personas por local, si el franquiciado está presente reeemplaza un puesto», señaló el socio.
Y detalló: «La obra civil está a cargo del franquiciado. Por mes se paga un fee de publicidad del 3% y el royaltie hoy no lo cobramos, nuestro negocio es la venta del producto. La inversión se recupera en un año y medio o dos, no sabemos cómo seguirá el contexto, pero ese es el tiempo».
Para los que busquen una inversión, sin estar en el día a día, La Fábrica ofrece un formato pasivo donde el interesado invierte un poco más pero no tiene que trabajar. «Le damos un porcentaje de la venta, que puede rondar un 10%, durante los cinco años que dura el contrato, con opción a renovar. Le permite en dos años y medio recuperar la inversión, de acuerdo al contexto y duplicarla a los cinco años. Se termina el contrato y el local le queda a La Fábrica. Como negocio financiero tiene una tasa altísima», asegura el socio de la cadena.
Una franquicia de La Fábrica cuesta desde 28.000 dólares
La inversión necesaria es de u$s35.000, lo operamos nosotros, le damos acceso a la venta. Hay gente con dinero pero no tiene ni tiempo ni expertise para ocuparse. La inversión es más alta porque nos encargamos de alquilar el local, ponemos más recursos a disposición y debemos entrenar a toda la gente», aseguró el socio y segunda generación de la familia fundadora.
Una cadena que al producir buena parte de los insumos logra precios competitivos en el mercado.