Fuente: iProfesional ~ Nacieron en el año 2013, en Argentina ya operan con 70 locales y son una de las redes de franquicias más grandes de todo el país
Costumbres Argentinas nació en 2013 con la producción de tortas, medialunas y pan, aunque luego se expandió a otros productos. Con más de 70 locales en todo el país, es una de las redes de franquicias más grandes a nivel local. A pesar de la pandemia y el contexto de crisis económica, proyecta seguir expandiéndose en territorio nacional y desembarcar en Miami, Uruguay y Chile.
«A pesar del contexto, no cerramos ningún local en estos dos años de pandemia, un logro para los franquiciados que confiaron en nosotros. Y no solo eso, sino que conseguimos abrir un promedio de 15 tiendas por año. La gente vio que nuestros locales tenían cola, aún con todo cerrado, y eso nos dio mucha publicidad», afirma Luis Videla, presidente de la empresa. El negocio, como gran parte del retail, se vio afectado por la pandemia: actualmente expenden un promedio de entre 400 y 600 tickets por día por tienda, mientras que antes eran 800. El número se vio afectado por la falta de circulación, el cierre de colegios y las municipalidades con poco personal a raíz del Covid-19.
De todos modos, Videla ve al 2021 como un buen año, en el que aprovechará para ampliar la marca a nivel nacional a través de su modelo «al paso», un formato modular de bajo costo. De hecho, en el primer mes y medio vendió 10 locales, cuando el promedio venía siendo de 18 por año. Hoy tiene más de 1.000 pedidos de franquicias que ingresaron solo en el último mes. «Estamos ordenándonos para una gran ampliación en Argentina», agrega Videla en una entrevista con Forbes, quien ya lleva un largo recorrido en la industria de los alimentos. Costumbres Argentinas sigue expandiéndose a pesar del contexto de crisis económica
Su última experiencia fue en Supermercados Coto como gerente de Ventas en el área de frescos y elaborados, donde tenía 2.500 personas a su cargo. Pero un día decidió independizarse y abrir su propio local, al cual llamó La Tortería. Con esa marca llegó a inaugurar 15 locales y a vender 15.000 tortas por mes. «En un momento empezaron a surgir propuestas para supermercados porque necesitaban achicar sus estructuras y en el sector de elaboración era donde más personal había», comenta. Esto lo motivó a proponerle a Disco venderle su producción y, con el primer camión, logró despachar todo su contenido en 24 horas. «Nos dimos cuenta de que los supermercados eran un gran negocio», explica. Inmediatamente se sumaron a la lista Jumbo, Walmart, DIA y Coto.
Costumbres Argentinas nació en 2013 con la producción de tortas, a las que luego sumó medialunas y pan. De a poco fueron ampliando las propuestas, desde pastelería, potes de helado de 300 gramos, paletas ?recientemente invirtieron en una máquina que produce 5.000 paletas por hora? y tortas heladas. También sumaron comidas ?con una línea de 18 platos de comidas congeladas accesibles, que rondan entre $ 150 y $ 290?, y empanadas, acompañadas de combos de gaseosas, pizzas, pastas, tartas, cafés, desayunos y meriendas. Y hace poco estrenaron una línea de productos veganos. Para Videla, la fortaleza es que, al ser una propuesta integral con un surtido de productos, no están atados a «las modas». Hoy, factura alrededor de $ 200 millones mensuales.
En los inicios, la producción se realizaba en un espacio de 200 metros cuadrados, pero se fueron ampliando hasta comprar un predio de tres hectáreas donde instalaron su planta de elaboración propia en Tigre, donde está ubicado el aeropuerto Don Torcuato. Equipada con instalaciones de tecnología de última generación, trabajan permanentemente en el cuidado de la calidad de cada producto y también en la incorporación de opciones nuevas como Costumbres Digital, su canal de ventas online, por ahora solo disponible para la zona del AMBA. En la empresa trabajan unas 300 personas. El modelo al paso de Costumbres Argentinas es la clave de su éxito
Desde que se instalaron allí invirtieron alrededor de us$ 10 millones en máquinas industriales, entre otras cosas. «En 2014 notamos que había consumo de clase media y empezamos a poner locales en estaciones de tren», resalta. Así nació el primero ubicado en Carupá, San Fernando, que curiosamente se abrió en tan solo una semana con cajones confeccionados con durloc. Lograron vender 500 docenas de medialunas cada día. La segunda tienda se abrió en José León Suárez, la tercera en Boulogne, la cuarta en Pilar y luego los 50 locales en CABA. Desde entonces, nunca más frenaron y comenzaron a recibir más consultas de potenciales franquiciados. «En 7 años superamos los 70 locales», destaca.
A su vez, la firma se instaló en Rosario y ahora desembarcó en Puerto Madryn, Entre Ríos, Corrientes, Córdoba, y la lista continúa en expansión. «No esperábamos tener esta repercusión tan rápido», aclara Videla. Dentro de la estrategia, planifica abrir 250 locales más en el país. Para el fundador, otra de las fortalezas es que los locales son multitarget: se acercan desde oficinistas, maestras y chicos que se juntan a comprar el almuerzo hasta madres que llevan comida lista para la familia. «Tenemos un sistema de monitoreo de 24 horas con más de 60 pantallas de 60 pulgadas donde trabajan seis personas. El objetivo es controlar las tiendas, los robos, la manipulación de mercadería, si se consume mucho o poco, y todos los detalles que hacen que el cliente se sienta a gusto», añade Videla.
La clave: su modelo al paso
Según Videla, el modelo de negocio es «rentable y fácil de operar», con una inversión final estimada de $ 4,9 millones, que incluye gastos de obra, equipamiento, habilitación, comunicación de la tienda, proyecto y contrato. Es un formato modular de bajo costo que permite obtener un ingreso interesante en el corto plazo, diseñado para quienes desean apostar a armar su propia pyme y ser dueños de un negocio en crecimiento. La propuesta del nuevo formato al paso contiene los dos pilares fundamentales de la marca, que son la calidad y los precios accesibles en todos los productos de elaboración 100% propia. «Es un modelo simple que puede ser operado por un dueño, una familia o un dueño más tres empleados», explica Videla. Y agrega: «Es un autoempleo porque con las ganancias puede vivir una familia tranquilamente».
Ahora que Costumbres Argentinas está consolidada con los locales en funcionamiento, se preparan para la gran expansión. Según explican, el modelo de franquicias funciona con agilidad, y en 48 horas las personas ya están facturando. «Una vez que el local está pintado, nosotros enviamos las franquicias en camión. Luego, enchufamos las heladeras, proveemos productos congelados y un horno de cinta para que todo se haga en el momento y que los clientes se lleven productos recién horneados, un plus que nadie tenía en el mercado», explica Videla. Te puede interesar
Recientemente vendieron la marca en Chile y Uruguay, en formato de máster franquicias. Asimismo, están en tratativas con un distribuidor de Estados Unidos para exportar los productos. Y una de las apuestas más ambiciosas es llegar a España y armar la marca, pero apuntando a un público ABC1, porque allí el mercado lo permite. Para ello, está armando un pool de inversión, ya que la operación requiere unos 2,5 millones de euros.