Fuente: Filo.News ~ Santos Vega tiene un sistema de canillas que permita repetir el cóctel sin importar quien lo despache.
Lograr el equilibrio de ingredientes para que un trago quede perfecto no es sencillo. Mucho menos, repetir el proceso y que el resultado sea el mismo. Es por esto que Santos Vega se propuso la posibilidad de repetir la fórmula para que el sabor de los tragos siempre esté en su máxima expresión, sin importar quién lo despache. ¿Cómo? A través de un sistema de canillas.
En este bar de Palermo (Niceto Vega 5924), además de la propuesta tradicional, se ofrecen diferentes cócteles tirados, cuyo proceso de elaboración, según explica Sebastián Cirrincione, uno de los socios, se realiza mediante un sistema de prebacheo en un barril, en donde se incorporan las cantidades estandarizadas de almíbar, azúcar y alcoholes, luego se cierra al vacío y se pone en la heladera para poder conectarlo directamente a las canillas.
«Buscábamos darle a los consumidores de bares un giro muy novedoso, con velocidad en la atención y el mismo sabor en los cocktails sin depender del bartender de turno», afirma Cirrincione.
Actualmente, el draught bar cuenta con cinco canillas y planea sumar cinco más en los próximos meses. Por el momento, los cócoteles -preparados por el jefe de barra Lean Milán- que se pueden disfrutar son Aperol Spritz (Aperol, espumante Norton y soda), Bramble (Gin Gordon´s, jugo de limón, jarabe de azúcar y jugo de arándanos), Gin Tonic (Gin Gordon´s tónica con pepino y romero), Penicilline (Johnnie Walker Red, jengibre, miel y limón) y Sea Breeze (Vodka smirnoff, jugo de naranja, jugo de pomelo y limón).
Para profundizar acerca de este sistema de canillas, uno de los socios de Santos Vega viajó a Estados Unidos y visitó algunos de los lugares que cuentan con esta técnica innovadora, como Yours Sincerely y Amor y Amargo, en nueva York, y Polite Provisions, en San Diego.
«Lo que nos identifica en Santos Vega es el hecho de habernos convertido en un lugar de encuentro diferente», asegura Cirrincione.