Fuente: Cronista – Varias marcas lanzaron en el mercado argentino cervezas sin alcohol, cuyo sabor, aseguran, es prácticamente igual al de la versión clásica. ¿En qué cambian? ¿Son una moda o una tendencia instalada? Los números del sector.
En el mundo, y la Argentina no está exenta, hay una tendencia a tomar menos alcohol. Desde bebidas con menor graduación alcohólica a tragos directamente sin alcohol (mocktails), la corriente llegó también al rubro de las cervezas y, recientemente, al de los vinos.
La tendencia se puede ver en la industria cervecera, donde varias marcas lanzaron en el mercado argentino cervezas sin alcohol. Su sabor -aseguran- es prácticamente igual al de la versión original.
Uno de los grandes jugadores del sector -y uno de los pioneros- es Cervecería y Maltería Quilmes, que ya en 2009 lanzó la cerveza sin alcohol Lieber para entrar en la categoría con la marca Quilmes. Luego, a partir de 2020, sumó Quilmes 0.0%, y más tarde agregó la versión sin alcohol de Stella Artois, su marca premium.
Otro de ellos es Heineken, de CCU Argentina, que en 2023 lanzó la Heineken 0.0 en el país.Un año después del lanzamiento, cuentan que tuvieron un crecimiento mayor al esperado, de «más del 100% año a año».
Cervezas sin alcohol: ¿cómo se hacen y en qué cambian a su versión original?
Hace unas semanas estuvo de visita en Argentina Willem van Waesberghe, el Global Master Brewer de Heineken. Es la persona que, desde hace más de 20 años, se ocupa del proceso de elaboración, la calidad, y de asegurarse que la cerveza Heineken tenga el mismo sabor en todo el mundo, independientemente de dónde uno la pruebe.
Willem visitó Argentina con el foco puesto en el lanzamiento de Heineken 0.0., elaborada con una tecnología que permite conservar el sabor y las cualidades (a excepción del alcohol) de la versión original.
«La Heineken original se hace con malta de cebada, agua, lúpulo y la levadura única de clase A de Heineken, la A-Yeast, sin aditivos. Para crear la 0.0 se usan los mismos ingredientes y se realiza el mismo procedimiento, la única diferencia es que se saca el alcohol previo al envasado. Algo a tener en cuenta es que al retirar el alcohol se pierden los aromas característicos de la Heineken y para que sigan presentes se los vuelven a agregar. De esta manera se logra una cerveza con un sabor muy similar a la de la original«, explicó en diálogo con El Cronista.
«Lo que más me gusta de la 0.0 es que es tan parecida a la original que tiene la capacidad de engañar a tu cerebro, al principio detectas la diferencia pero mientras más la bebes más la disfrutas, porque es muy parecida a la primera versión», precisó.
Mariano Grosso, Maestro Cervecero y director de Innovaciones de Quilmes, explicó cómo es elproceso de elaboración de la versión sin alcohol de Stella Artois, que se elabora desde el año pasado en la fábrica que el grupo tiene en Zárate, Provincia de Buenos Aires.
«Es muy similar al de la Stella Artois Clásica, con la diferencia de que, una vez obtenido el producto, éste se desalcoholiza, mediante destilación a muy baja presión, logrando de esta manera evaporar el alcohol sin exponer a la cerveza a las altas temperaturas y obteniendo como resultado una lager de intenso sabor y final delicado, pero sin alcohol», indicó.
«Elaboramos Stella Sin Alcohol localmente gracias a una inversión de u$s 3 millones para incorporar nuestra primera planta dealcoholizadora en nuestra cervecería de Zárate. A partir de este proyecto, comenzamos a elaborar Stella Artois Sin Alcohol en porrón 330 ml y en la nueva lata 473 ml», añadió.
Tomar menos alcohol: ¿moda o tendencia instalada?
Mariano Grosso confirmó que hay una tendencia hacia el consumo de bebidas con menor graduación alcohólica, que se corresponde con un consumo más consciente, donde se prioriza el impacto en la salud, el bienestar y también se valora la sustentabilidad de las marcas.
Si bien en Argentina no se percibe tanto, este segmento de bebidas está mucho más desarrollado en otros países del mundo, como Alemania, Canadá, Estados Unidos y España.
«Desde el lanzamiento de Quilmes 0.0% en 2020, el segmento de cervezas sin alcohol viene creciendo mucho, sin embargo, el potencial que tiene es aún muy grande, en nuestro país pesa menos del 5% cuando hay mercados en los que pesa casi 20%», apuntó.
«Es una tendencia que se ve más en los jóvenes, pero también hay generaciones mayores que buscan opciones sin alcohol porque quieren consumir una cerveza rica en situaciones que no permiten el consumo de bebidas alcohólicas», aseguró por su parte Willem van Waesberghe.
En esta línea, desde Heineken señalaron que aunque el mercado de cervezas 0.0% es aún pequeño en Argentina, está en pleno desarrollo y cada vez se ven más marcas apostando, como es el caso de las Imperial Golden y Roja 0.0 lanzadas también por CCU a fin del año pasado.
«Espero volver en unos años y ver un segmento mucho más desarrollado, con más ofertas de calidad y con un consumidor acostumbrado a estas opciones que nos permiten disfrutar de una gran cerveza en momentos que antes era impensado», concluyó el maestro cervecero.