Fuente: Bae ~ La gastronomía porteña se reformula. Varios bares y restaurantes han cerrado, otros cambian los paquetes accionionarios para ver si sobreviven a la post pandemia. Ariel Amoroso, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC), evaluó las consecuencias que puede sufrir el sector y contó que entre lo que solicitaron al Gobierno de la Ciudad, pidieron poner mesas en el espacio público, hacer dársenas en algunas calles y avenidas que lo permiten, además de varias eximiciones.
Cuando el sector se sentó en la mesa con el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta llevó un listado de necesidades. Ariel Amoroso explicó a BAE Negocios: “La situación es muy complicada hay 8000 bares y restaurantes en la ciudad y podrían cerrar 2000 establecimientos. Esta quebrando mucha gente, otros sabemos que no van a abrir. Los que abrán no van a poder sostenerse con un nivel de ventas muy bajo. Hay que aguantar la cuarentena y aguantar la reapertura, hay que pagar sueldos, comprar todos los productos frescos para reabrir y poner en condiciones los locales”.
Desde la asociación que nuclea a los hoteles, restaurantes, confiterías y cafés saben que no les alcanza con que la Ciudad levante la cuarentena. “Abrir las puertas sin gente en la calle no sirve y eso no depende del Gobierno. Hoy la gente va a su trabajo y listo. Necesitamos gente que tenga ganas de salir como antes y es muy complicado porque todos tenemos mucho miedo. Da mucha tristeza la incertidumbre”, sostuvo Amoroso.
La gastronomía intenta sobrevivir con el take away y el delivery, pero las ventas son muy escasas y enfrentan otro problema. “Pedimos que el Estado regule a las plataformas de delivery. Es imposible trabajar con las aplicaciones, te cobran hasta un 30% del valor del ticket facturado, con IVA incluído. Pagan a los 21 o 35 días, ya no te sirve vender, porque además, le cobran aparte al cliente. Quiero ser la aplicación, son los que más ganan”, dijo el presidente de la AHRCC.
Gastronomía contra las app
Con experiencia en el sector, sabe que las app llegaron para quedarse y avanzar cada vez más en el sector. Agregó: “Necesitamos que bajen las comisiones, se van a quedar con todo el negocio, como pasó con las app que ofrecen hotelería. Exigen que el comercio no venda más barato que ellos y después para vender, les tenes que pedir permiso. Las app avasallan a la gastronomía, son una pesadilla. Todos perdemos, menos ellos. Estamos evaluando que medidas tomar”.
Al Jefe de Gobierno porteño lo fueron a ver con un listado de reclamos para ayudar al sector: “Pedimos no pagar el ABL por un año, no pagar Ingresos Brutos por 180 días, a partir de que abramos las puertas. Lo que ya conseguimos fue nos devuelvan los saldos a favor de Ingresos Brutos, se podrán gestionar en la Agencia Gubernamental de Ingresos Públicos, era algo que reclamábamos hace años. Son saldos que te retenían y no podías imputarlo para el pago de ningún otro impuesto. Todos los que tenían saldo a favor podrán pagar alquileres o sueldos, será de gran ayuda”, dijo Ariel Amoroso.
El sector de bares y restaurantes porteños saben que van a tener que reabrir al 50% de su capacidad y con mesas a dos metros, por ahora, en el protocolo, no se habla de instalar paneles, aseguran en la AHRCC. “El panorama es tétrico, el día que abramos la venta alcanzará el 30% de que fue y cómo se sostiene un local si se necesita un 70% para estar en el punto de quiebre”, se pregunta.
El uso del espacio público
Para poder sumar más mesas, el sector de bares y restaurantes, le llevó una propuesta a Rodríguez Larreta, según contó a BAE Negocios, Amoroso: “Necesitamos poder utilizar mayor espacio público para los negocios. No sólo pensamos en veredas, sino la posibilidad de que aquellos bares linderos a un parque puedan poner algunas mesas. Otra propuesta es hacer algunas dársenas en algunas avenidas que nos permitan sumar más mesas. Pensamos en avenida de Mayo, Pedro Goyena en Caballito y hasta en la avenida Santa Fe, entre algunas más”.
Según Ariel Amoroso, la propuesta presentada especifíca: “Queremos que nos den la posibilidad de tomar más espacio público. Por lo menos dos metros desde la línea municipal hacia el cordón y de ahí poner mesas y sillas. Por cada silla, dejar un metro cuadrado de distancia, hacer lo mismo y poder expandirse no sólo en el frente del local. Frente a Parque Rivadavia hay un bar, que pueda poner cinco mesas en frente, en la plaza. En Parque Centenario, por el lado de Marechal se podría agrandar el espacio público para que la gastronomía pueda avanzar”.
El listado de pedidos es mayor aún: “Pedimos que no nos consideren grandes generadores de basura, porque si no tenemos que pagar nuestra propia recolección, además de pagar el CEAMSE. Nuestro sector genera menos basura que un edificio. También pedimos hacer los cursos de manipulación de alimentos en nuestras instituciones y no en el Gobierno de la Ciudad, fumigar todos los meses no cada 15 días y que no nos cobren por la oblea. Hacemos tres simulacros al año, poder hacer uno sólo. Son varios los temas que podrían ayudarnos a salir airosos sin más cierres”.