Fuente: Clarín by María Florencia Pérez – Ya se puede comprar para llevar o consumir en la mayoría de sus 11 locales. Cuáles son sus propuestas y a qué precios.
A más de dos años del inicio de las obras en el segundo piso del shopping de barrio, finalmente este lunes acaba de abrir sus puertas Mercat Caballito, un nuevo mercado gastronómico de Buenos Aires con 11 locales de comida y bebidas y góndolas con 1500 productos orgánicos diferentes.
Está ubicado a tan solo una cuadra de la agitada esquina de Acoyte y Rivadavia, en uno de los barrios más poblados de la Ciudad, donde prevalecen las cadenas de locales gastronómicos por sobre la diversidad gourmet. Por eso este mercado que tiene una identidad similar a su predecesor, el Mercat Villa Crespo, generó tanta expectativa entre los vecinos de Caballito.
“Calculamos que la afluencia de público de Mercat Caballito va a ser un intermedio entre la cantidad de gente que pasa por Mercat Villa Crespo y Base Alto Palermo”, estima Marcelo Pirogovsky, uno de los creadores de estos tres espacios. Y hasta se atreve a estimar una cifra concreta: “Creemos que van a venir unas 50 mil personas por mes. Este es un barrio que da para eso”.
Cómo es el nuevo Mercat Caballito
El nuevo mercado de Caballito funciona de forma independiente del centro comercial. Sus visitantes pueden comprar productos y comer y beber in situ desde las diez de la mañana hasta la medianoche todos los días de semana.
Una diferencia importante con respecto al Mercat de Villa Crespo es que tiene dos modalidades comerciales. Por un lado, bares, restaurantes, barras y cafeterías cuyos platos se pueden consumir en alguna de las mesas o barras del lugar, por delivery (vía la app Pedidos Ya) o take away.
Además, está recorrido por la propuesta de la firma Argentbio que se materializa en más de 170 metros lineales de góndolas bajas con tal variedad de productos orgánicos que según los creadores del mercado, representa la mayor oferta de este tipo que hay hoy en la Ciudad.
Frutas y verduras frescas, legumbres y cereales a granel, vinos, quesos, chocolates: más de 200 proveedores de productos artesanales y agroecológicos se conjugan en este espacio donde la trazabilidad de la mercadería está garantizada y en el que sólo se usan envases reciclables.
Qué comer y beber en el nuevo Mercat Caballito
Las empanadas tucumanas de La Casa del Tafí. Foto: Lucía Merle
Al ingresar al Mercat el primer local es Nórdica: un restaurante de comida danesa con chef autóctono a la cabeza donde probar los tradicionales Smørrebrød (una rebanada de su tradicional pan de centeno con diferentes ingredientes arriba).
Un recomendado: el de paté de cerdo horneado con panceta, hongos, pepinos, cebollas crocantes y microgreens ($ 900). También, el pan de masa madre (100 % centeno, semillas y malta) que pesa 1,100 g y vale $ 900. Los tradicionales Smørrebrød de Nórdica. Foto: Lucía Merle.
Siguiente parada: Moisha, panaderíaespecializada en cocina judía que además de estar presente en el Mercat Villa Crespo, tiene otras cuatro sucursales en la Ciudad. Una de las novedades: además delhummus tradicional ($ 780), van a incorporar uno de remolacha y otro de zanahoria.
Por supuesto que también son de la partida sus clásicos pretzels (salados y dulces) que valen desde $ 370. También hay picadas (con preparaciones típicas como bohios, lajmayin y keftes de puerro ) por $ 1.900 (la individual) y ($ 3.700 para compartir). La barra de Lando Bar en Mercat Caballito. Foto: Lucía Merle.
Otro local que se hizo conocido en Mercat Villa Crespo es La Casa del Tafí que vende empanadas elaboradas en Tucumán. La carta es breve y cumplidora: cinco variedades tradicionales (atención a la de ternera y queso), 3 veggies y 3 especiales, entre las que se destaca la de osobuco braseado. Valen $ 350 por unidad y $ 3500 la docena, ya sea cocida o congelada para preparar en casa.
En materia de bebidas hay dos barras: una de ellas se llama Pulso y está destinada a la cerveza. Tienen 4 variedades de Patagonia, dos de Andes y una de Stella Artois a $ 600 la pinta. La segunda es Lando Bar que tiene desde hits imbatibles de la coctelería como Gin Tonics y Negronis por $ 1.150 hasta tragos de autor por $ 1.300. Además, vinos por copa desde $ 800 y por botella desde $ 3.200.
Los bohios de Moisha en Mercat Caballito. Foto: Lucía Merle.
Lado A es la parada obligada de los carnívoros: es un restaurante de carnes y charcutería artesanal que en esta sucursal está estrenando una parrilla inspirada en un fogón mexicano que permite que la carne se tiernice y se ahume al mismo tiempo.
La degustación de salchichas artesanales vale $ 800. Imperdible el pastrami de bondiola ($ 1.700) y de carne de res ($ 2.100). Para los tradicionalistas, el sándwich de cuadril asado a la leña con lechuga y tomate ($ 2.000).
Culto Café en Mercat Caballito. Foto: Lucía Merle.
En L’Artisan, el primer restaurante que esta marca especializada en pastas congeladas tiene en la Ciudad, el hit son los raviolones. Hay de calabaza y mascarpone con salsa de salvia ($ 1800) y de cordero con salsa de hongos ($ 2000), entre otros gustos. También entradas desde $ 1500 (por ejemplo, ensalada César o rabas con ali oli).
En Culto Café hay muy buena pastelería (incluso tienen opciones sin TACC) y por supuesto, café de especialidad pero “sin fundamentalismos”. Esto significa que en la carta se puede encontrar desde un flat white ($ 650) a un latte ($ 560) pero les sirven sus bebidas con el mismo esmero a quienes piden el típico cortado porteño o un café con leche.
En una semana cuando empiecen a funcionar Kyopo, un restaurante coreano que por primera vez tiene una sucursal fuera del barrio de Flores, y Cacho, que en Palermo hace un tributo a la clásica rotisería porteña, ya van a estar en marcha la mayoría de las propuestas. La última incorporación será Furio, una pizzería napoletana cuyo primer local está en el Mercado de los Carruajes.
El Mercat Caballito queda en la segunda planta del Caballito Shopping Center (Rivadavia 5108). Está abierto todos los días de 10 a 24 horas. Instagram: @mercat.caballito