Fuente: Cronista ~ La Ciudad de Buenos Aires siempre fue territorio hostil para la plataforma de transporte Uber desde su llegada al país en 2016. Protestas, pulseadas con el Gobierno porteño por su situación normativa y guiños y reveses judiciales marcaron su experiencia en este territorio. No obstante, la compañía anunció que expandirá su oferta de productos en CABA y a partir de hoy sumará Uber Eats , su unidad dedicada al delivery de comidas.
Pasó más de un año desde que esta pata de negocios de Uber llegó al país. A diferencia de la plataforma de transporte, la firma optó por Mendoza, primera ciudad en legalizar su servicio, para que Eats debutara en el mercado local a fines de noviembre de 2018.
Más tarde se expandió a Córdoba y, poco a poco, fue abriéndose por el Gran Buenos Aires. Primero llegó a Ramos Mejía y Haedo y en los meses siguientes comenzó a operar en Zona Oeste (Castelar, Ituzaingó, San Justo y Ciudadela), Zona Norte (Vicente López, San Isidro, San Martín, Villa Ballester y Tres de Febrero), Zona Sur (Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Banfield y Adrogué) y La Plata.
Respecto de la estrategia de expansión, fuentes de Uber, en diálogo con El Cronista, explicaron: «Fue la idea desde el principio, ir desde afuera hacia adentro. Primero rodear la Ciudad de Buenos Aires y tener esa presencia en mercados que estaban un poco fuera de esta tendencia y se encontraban más atados al delivery tradicional».
La aplicación de delivery, que funciona separada de la de transporte, comenzará a operar oficialmente hoy en CABA, más precisamente en los barrios de Palermo, Recoleta, Belgrano y Colegiales. Desde la firma explicaron que, en esta ocasión, abrieron la opción para que empresas de mensajería por moto pudieran registrarse para ser ‘socios-repartidores’ y así “brindar una experiencia consistente desde el primer día”.
«Tenemos dos modelos. En Mendoza, Córdoba y GBA operamos con ‘socios-repartidores’ y en CABA abrimos para que las empresas de reparto pudieran registrarse. Estamos avanzando hacia un modelo mixto donde conviven independientes y empresas dentro de la plataforma», señalaron desde la compañía ante la consulta de El Cronista. Asimismo, confirmaron que, a diferencia del negocio de viajes, para Eats sí está habilitado el pago con todas las tarjetas de crédito.
Contará con más de 700 restaurantes en este territorio, con un total de casi 2000 locales a disponibles a nivel país. En la Ciudad de Buenos Aires competirá mano a mano con otras aplicaciones del sector que ya tienen experiencia en el mercado porteño como la uruguaya PedidosYa , la española Glovo y la colombiana Rappi .
Sin embargo, a diferencia de las demás, Uber Eats solo incluye restaurantes dentro de sus servicios y no supermercados, farmacias y otro tipo de tiendas como sí lo hacen el resto de los players. Este aspecto podría cambiar luego de la adquisición de la chilena Cornershop a comienzos de octubre.
Uber comenzó a testear el negocio del delivery de comida a mediados de 2014. Primero realizó una prueba piloto en Santa Mónica, California, bajo el nombre de UberFresh. Luego de que su performance convenciera a la compañía de continuar con esta unidad, y tras un renaming, se expandió por varias ciudades de los Estados Unidos y llegó a las primeras capitales de Europa en 2016.
La unidad dedicada al reparto de comida fue una de las de mayor crecimiento en lo que va del año. Durante el primer semestre, Uber Eats reportó 6457 millones de reservas, un 99% más respecto del mismo periodo de 2018. A su vez, registró ingresos netos por u$s 1131 millones, un incremento del 80% versus los primeros seis meses del año pasado. En comparación, entre enero y junio de 2019, el negocio de viajes tuvo un revenue de u$s 4724 millones.